Si combinamos las palabras verano y calzado femenino, nos referimos a las clásicas y frescas sandalias. No hay dudas de que son los zapatos perfectos para un día caluroso, cuando no queremos saber nada de zapatillas, calcetines o cualquier otra prenda que no deje respirar a nuestros pies.
Para toda ocasión hay una sandalia, pues existen un montón de tipos de sandalias disponibles para elegir de acuerdo a nuestro estilo y gustos. Por ejemplo, tenemos las sandalias de flip flop, muy parecidas a las ojotas, que nos vienen muy bien para ir a la playa. Por otro lado, tenemos las que son el último grito de la moda las sandalias romanas o gladiadoras.
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